1: Antes de sanar, al arte de prevenir | Semana 2: Endocrino: Las llaves del metabolismo | Semana 3: La salud mental es fundamental | Semana 4: Cosas del corazón, cardiología | Semana 5: Músculos y huesos | Semana 6: Oncología | Semana 7: Hombres y mujeres saludables | Semana 8: Los niños primero: Pediatría | Semana 9: Honrar la sabiduría: Geríatría | Semana 10: Joyas de infectología
Editorial
Esta semana iba a estar dedicada originalmente a aprender sobre el cáncer de mama. Sin embargo, al preparar el contenido, comprendimos algo fundamental: no se puede hablar a profundidad de un tipo específico de cáncer sin conocer antes lo que representa el cáncer en sí mismo.
Llamarlo por su nombre no basta. Para entender lo que implica en el cuerpo, en la clínica y en la vida, es necesario retroceder unos pasos y mirar su origen desde las bases: cómo se define, cómo se clasifica, qué lo causa, cómo se detecta y en qué momento puede prevenirse.
Por eso, decidimos que esta semana estará dedicada a los fundamentos del cáncer. Hoy iniciamos con sus generalidades: qué es, cómo se organiza el conocimiento sobre él y por qué no es una sola enfermedad, sino una familia de procesos biológicos complejos.
Mañana abordaremos las propiedades celulares que permiten que una célula normal pierda el control, escape al orden del tejido, sobreviva a las defensas del organismo y continúe creciendo con nuevas capacidades. Hablaremos de los rasgos comunes que le dan al cáncer su nombre, no se un sólo tipo de cáncer en sí.
Cada día de esta semana construirá una pieza del mapa que necesitamos para leer esta enfermedad con mayor claridad. Porque antes de intervenirla, hay que entender cómo se forma.
— Manuel Alejandro Monroy Funes